Cada año, los días 1 y 2 de noviembre se colocan altares de muertos con flores y alimentos, recordando a nuestros seres queridos que ya han partido al más allá. … Los objetos básicos incluyen veladoras, sal, incienso, calaveritas de azúcar, el tradicional pan de muerto y flores de cempasúchil.
“El culto a la vida, si de verdad es profundo y total, es también culto a la muerte. Ambas son inseparables. Una civilización que niega a la muerte acaba por negar a la vida”.

“El mexicano no sólo come y tiene antojos a todas horas… ¡también quiere comer hasta en la tumba!”.
El fotógrafo, muralista e ilustrador Juan de Dios Garza Vela muestra con su proyecto ‘Muertitos de Hambre’ dos de las cosas que más celebran los mexicanos: su gastronomía y la muerte.
“Busco ilustrar elementos y personajes que todos conocemos, hemos crecido con ellos o simplemente hemos visto: el carnicero, el de los tacos de canasta con su bicicleta, la señora de las quesadillas…”, dice.
En los altares de muerto es muy tradicional poner la comida que le gustaba al difunto, Garza lo ve como una manera de seguir conectados a los que queremos.










El Candelabro. Iluminando Mentes