Los salmos son un conjunto de cinco libros de poesía religiosa hebrea que forma parte del Tanaj judío y del Antiguo Testamento. El Libro de los Salmos está incluido entre los llamados Libros Sapienciales. También es conocido como Alabanzas o Salterio. Suele encontrarse entre los libros de Job, Proverbios y Cantares

DEFINICION DE SALMO
Salmo es un concepto que procede del vocablo latino psalmus. El término se emplea para nombrar a una composición que se pronuncia o entona para alabar a una divinidad.
Los salmos tradicionales del catolicismo y del judaísmo se encuentran recopilados en una serie de libros que forman parte del Antiguo Testamento y del Tanaj. Hay que destacar, de todas formas, que los babilonios, los sumerios y otros pueblos antiguos también tenían sus propios salmos.
Es posible distinguir entre diferentes tipos de salmos: los salmos didácticos, los salmos de acción de gracias, los salmos de sabiduría y otros. Cabe destacar que los salmos tradicionales, en su conjunto, son mencionados como parte del Libro de los Salmos de David. El Libro de los Salmos de Salomón, por su parte, es una obra que habría sido creada en el año 60 a.C. y que los católicos califican como apócrifica.
Dentro de las mencionadas obras de los salmos, hay que destacar que los documentos allí recogidos se pueden clasificar según el género al que pertenecen. Y es que son los muchos los que se incluyen, destacando de modo especial los siguientes:
-Las súplicas.
En este grupo se encuentran todos aquellos salmos que lo que hacen es acometer peticiones y ruegos de una persona individual sobre lo que sería la colectividad. En concreto, entre los mismos destaca el más conocido: “Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”, que es el Salmo número 22.
-Los salmos reales. Se denominan así porque tienen que ver con la realeza. Más exactamente unos versan sobre lo que es la figura del rey David y otros giran en torno a lo que es la realeza divina. En el primer grupo está, por ejemplo, el Salmo número 45 y en el segundo se halla enclavado el Salmo 93.
-Los Cánticos de Sión. Como su propio nombre indica, versan sobre las glorias de Sión y narran hechos que tienen como protagonistas a figuras bíblicas como sería el caso de Moisés.
-Los salmos didácticos, tal y como ya nos lo deja claro su nombre, son los que se realizan con el claro objetivo de enseñar. En concreto, suelen girar alrededor de lo que es la ética israelita.
-Los himnos, que aparecen tanto en Antiguo como en el Nuevo Testamento y que tienen la particularidad de no incluir ningún tipo de súplica o ruego. Son simplemente cantos de alabanza.

El Candelabro. Iluminando Mentes