El ileísmo es una técnica lingüística antigua que consiste en el uso reflexivo de la primera persona del singular en lugar de los pronombres personales convencionales en la comunicación verbal. Aunque su nombre puede sonar complicado, su práctica es simple y puede ser utilizada para mejorar la claridad en la comunicación y la reflexión personal. Desde la antigua Grecia, el ileísmo ha sido utilizado por filósofos y pensadores para expresar la subjetividad en la comunicación y para enfocar la atención en uno mismo y en sus propios pensamientos y emociones.



“El ileísmo: una antigua técnica para mejorar la claridad en la comunicación y la reflexión personal”


El ileísmo es una técnica lingüística que consiste en el uso reflexivo de la primera persona del singular en lugar de los pronombres personales convencionales (mí, me) en la comunicación verbal. Esta técnica ha sido utilizada por filósofos y pensadores durante siglos para mejorar la claridad en la comunicación y la reflexión personal. Aunque su nombre puede sonar complejo, su práctica es muy simple.

El ileísmo se origina en la antigua Grecia, donde se utilizaba la primera persona del singular como un método para expresar la subjetividad en la comunicación. En la actualidad, el ileísmo ha sido adoptado por diversas corrientes de pensamiento y disciplinas, incluyendo la psicología, la filosofía, la literatura y la retórica.

La práctica del ileísmo es beneficiosa para el pensamiento crítico y la reflexión personal, ya que ayuda a las personas a enfocar su atención en sí mismas y en sus propios pensamientos y emociones. El uso reflexivo de la primera persona del singular permite a las personas analizar sus propias experiencias y pensamientos, lo que puede ser útil para identificar patrones de comportamiento y emociones repetitivas, y para descubrir nuevos conocimientos y perspectivas.

Además, el ileísmo también puede ayudar a mejorar la claridad en la comunicación, ya que permite a los hablantes expresar sus ideas y sentimientos de manera más precisa y directa. Al usar la primera persona del singular de forma reflexiva, los hablantes pueden comunicar sus pensamientos y sentimientos con mayor claridad, evitando confusiones y malentendidos.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que el ileísmo no debe ser utilizado de manera excesiva o como una forma de narcisismo o egocentrismo. Es importante equilibrar el uso reflexivo de la primera persona del singular con la consideración y el respeto hacia los demás en la comunicación.

El ileísmo es una técnica lingüística antigua que puede ser utilizada para mejorar la claridad en la comunicación y la reflexión personal. Su práctica puede ayudar a las personas a identificar patrones de pensamiento y emociones repetitivas, descubrir nuevos conocimientos y perspectivas, y expresar sus ideas y sentimientos de manera más precisa y directa.

Sin embargo, es importante usar esta técnica con precaución y equilibrio para evitar caer en el egocentrismo o la falta de consideración hacia los demás en la comunicación.

Estudios sugieren que hablar de uno mismo en tercera persona es bueno. Ya sea diciéndolo en silencio, hacia adentro, o expresándose en voz alta. No debemos tener temor. Todos lo hacemos y nos da buenos resultados. Nos hace sentir mejor. Sólo debes observar que te sientas bien al hacerlo.

Aquí te presento 10 ejemplos con el contraste de cómo se dirían normalmente y cómo se dirían con ileísmo:

  1. Normalmente: “Creo que deberíamos tomar un descanso.” | Con ileísmo: “Yo creo que deberíamos tomar un descanso.”
  2. Normalmente: “Quiero hacer una sugerencia.” | Con ileísmo: “Yo quiero hacer una sugerencia.”
  3. Normalmente: “Siento que no puedo hacerlo.” | Con ileísmo: “Yo siento que no puedo hacerlo.”
  4. Normalmente: “Veo las cosas de manera diferente.” | Con ileísmo: “Yo veo las cosas de manera diferente.”
  5. Normalmente: “Pienso que deberíamos cambiar de estrategia.” | Con ileísmo: “Yo pienso que deberíamos cambiar de estrategia.”
  6. Normalmente: “Necesito un poco más de tiempo para pensarlo.” | Con ileísmo: “Yo necesito un poco más de tiempo para pensarlo.”
  7. Normalmente: “Prefiero no hablar sobre eso.” | Con ileísmo: “Yo prefiero no hablar sobre eso.”
  8. Normalmente: “Estoy teniendo dificultades para entenderlo.” | Con ileísmo: “Yo estoy teniendo dificultades para entenderlo.”
  9. Normalmente: “Estoy sintiendo una gran alegría.” | Con ileísmo: “Yo estoy sintiendo una gran alegría.”
  10. Normalmente: “Creo que podríamos hacerlo mejor.” | Con ileísmo: “Yo creo que podríamos hacerlo mejor.”

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