La etiqueta y la cortesía son dos elementos fundamentales en nuestra vida social. Saber cómo comportarse adecuadamente en diferentes situaciones puede marcar la diferencia entre una interacción agradable y una experiencia incómoda o incluso desagradable. En este sentido, conocer las normas de etiqueta y cortesía es esencial para establecer relaciones sociales y profesionales positivas y respetuosas, así como para proyectar una buena imagen personal y profesional. En esta entrada, exploraremos la importancia de estas normas y cómo pueden aplicarse en diferentes contextos sociales.

Normas de etiqueta y cortesía: cómo comportarse adecuadamente en diferentes situaciones sociales.
Las normas de etiqueta y cortesía son un conjunto de reglas de comportamiento que se utilizan en la sociedad para establecer un comportamiento adecuado y respetuoso en diferentes situaciones sociales. Estas normas varían según la cultura, el país y la ocasión, pero en general se consideran como un conjunto de comportamientos que se consideran apropiados en situaciones sociales formales e informales.
Algunos ejemplos de normas de etiqueta y cortesía incluyen saludar a las personas con una sonrisa y un apretón de manos o un beso en la mejilla, usar un lenguaje apropiado y respetuoso, mantener una buena postura, no interrumpir a otros mientras hablan, respetar las diferencias culturales, no hablar con la boca llena, decir “por favor” y “gracias” con regularidad, y vestirse adecuadamente según la ocasión.
Las normas de etiqueta y cortesía son importantes porque ayudan a las personas a establecer relaciones sociales y profesionales positivas y agradables, fomentan el respeto mutuo y la consideración, y hacen que las personas se sientan cómodas y seguras en situaciones sociales.
Además, seguir las normas de etiqueta y cortesía puede mejorar la imagen personal y profesional de una persona, lo que puede llevar a oportunidades de éxito en la vida. Por ejemplo, saber cómo comportarse adecuadamente en una cena de negocios puede influir en cómo se percibe la capacidad de una persona para trabajar en equipo y relacionarse con otros.
Sin embargo, es importante recordar que las normas de etiqueta y cortesía no son universales y pueden variar de una cultura a otra. Es necesario estar atentos a las normas y prácticas sociales de cada lugar y situación, y adaptarse a ellas para evitar ofender a los demás y ser respetuosos con las diferencias culturales.
En resumen, las normas de etiqueta y cortesía son un conjunto de comportamientos y prácticas sociales que se utilizan para fomentar el respeto mutuo y la buena convivencia en diferentes situaciones sociales.
Seguir estas normas puede mejorar la imagen personal y profesional de una persona y fomentar relaciones sociales y profesionales positivas.
ALGUNAS NORMAS SOCIALES QUE PUEDEN AYUDARTE:
- No llames a nadie más de dos veces seguidas. Si no responde a tu llamada, asume que tiene algo importante que hacer.
- Devuelve el dinero que pediste prestado antes de que la otra persona recuerde que te lo prestó. Esto muestra tu integridad y carácter. Lo mismo ocurre con paraguas, bolígrafos y cajas de almuerzo.
- Nunca pidas el plato más caro del menú cuando alguien te ofrece un almuerzo o una cena. Si es posible, pídele que ordene el plato que elija para ti.
- No hagas preguntas incómodas como “Oh, ¿todavía no estás casado” O “¿No tienes hijos?”, o “¿Por qué no compraste una casa?” O “¿por qué no compras un auto?”. Por el amor de Dios, no es tu problema.
- Siempre abre la puerta a la persona que viene detrás de ti. No importa que sea niño o niña, señor, señora o joven. Uno no se hace pequeño tratando bien a alguien en público.
- Si tomas un taxi con un amigo y paga ahora, intenta pagar la próxima vez.
- Respeta los diferentes tonos de opinión. Recuerda que lo que es el número 6 para ti será el 9 para la persona que está enfrente. Además, una segunda opinión es buena para una alternativa.
- Nunca interrumpas a la gente que habla. Dejen que se desenvuelvan. Como dicen, escúchenlos a todos y fíltrenlos a todos.
- Si estás bromeando con alguien y no parece apreciarlo, para y nunca lo vuelvas a hacer. Esto le anima a hacer más y muestra cuánto lo aprecias.
- Di “gracias” cuando alguien te ayude.
- Alaba en público. Critica en privado.
- Casi nunca hay razón para comentar el peso de una persona. Sólo di: “Te ves fantástico”. Si quieren hablar de su pérdida de peso, lo harán.
- Cuando alguien te muestra una foto en su teléfono, no deslizes a la izquierda o a la derecha. Nunca sabes lo que va a seguir.
- Si un colega te dice que tiene una cita con el médico, no le preguntes para qué es, simplemente di “Espero que estés bien”. No los pongas en la posición incómoda de tener que contarte sobre su enfermedad personal. Si quieren que lo sepas, lo harán sin tu curiosidad.
- Trata al agente de mantenimiento con el mismo respeto que al CEO. Nadie está impresionado con la grosería con la que puedes tratar a alguien de tu rango, pero la gente se dará cuenta si los tratas con respeto.
- Si una persona te habla directamente, mirar tu teléfono es grosero.
- Nunca des consejos antes de que te los pidan.
- Cuando conoces a alguien después de un largo tiempo, a menos que quiera hablar de ello, no le preguntes su edad y su salario.
- Preocúpate de tus asuntos, a menos que estés directamente interesado – mantente fuera.
- Quítate las gafas de sol si hablas con alguien en la calle. Es una señal de respeto, además, el contacto visual es tan importante como tu discurso.
- Nunca hables de tus riquezas en medio de los pobres. Igualmente, no hables de tus hijos en medio de los estériles.
- Después de leer un buen mensaje, trata de decir “Gracias por el mensaje”.
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