Entra en el majestuoso mundo de la catedral de Toledo, donde la historia y el arte se entrelazan en una danza cautivadora. Como un susurro en los pasillos sagrados, te invito a descubrir una joya oculta en su interior: el Transparente. Un tesoro barroco, concebido por el talentoso arquitecto Narciso Tomé y sus hijos, que desafía los límites de la imaginación y la creatividad. Permíteme guiarte a través de los secretos y las historias que envuelven esta obra de arte única, donde la luz se convierte en un lienzo divino y los materiales se fusionan en un abrazo eterno. Adelante, adéntrate en los misterios del Transparente de la catedral de Toledo y déjate seducir por su esplendor inigualable. Bienvenido a un viaje fascinante hacia la belleza que trasciende los límites de la escultura y la arquitectura.




El impacto del Transparente en la arquitectura churrigueresca


El Transparente de la catedral de Toledo es una destacada obra del arte barroco que se encuentra en el muro absidial de la catedral, específicamente en el trasaltar mayor. Fue construido entre los años 1721 y 1732 por el arquitecto Narciso Tomé, quien contó con la ayuda de sus hijos en su creación. Tomé fue designado como arquitecto suplente de la catedral en 1721.

El estilo artístico del Transparente sigue la estética churrigueresca, desarrollada principalmente por el arquitecto español José de Churriguera. A lo largo de los años, esta obra ha despertado polémica debido a su exuberancia. No obstante, actualmente se considera como la obra maestra de Narciso Tomé y se valora más por su composición arquitectónica que por su aspecto escultórico.

La construcción del Transparente empleó mármoles traídos desde Génova, así como jaspe y bronce. La idea detrás de su creación fue permitir que la luz llegara al sagrario ubicado detrás de él. Para lograr esto, se abrió un óculo en el muro absidal. Este óculo recibe la luz a través de los tragaluces situados en la parte superior del ábside, de modo que el Transparente se ilumina y a la vez dispensa la luz a través del óculo hacia el sagrario. Es interesante notar que esta apertura en el muro puede recordar al óculo creado por Bernini en el altar de la Cátedra de San Pedro en Roma.

La inscripción grabada en latín en la esquina inferior derecha del Transparente revela que Narciso Tomé fue el autor de la obra. Dice lo siguiente en castellano: “Narciso Tomé, Arquitecto Mayor de esta Santa Catedral Primada, delineó, esculpió y a la vez pintó por sí mismo toda esta obra compuesta y fabricada de mármoles, jaspe y bronce”. Esto destaca el papel integral que Tomé desempeñó en la creación de esta magnífica pieza artística.

El Transparente de la catedral de Toledo continúa siendo una joya arquitectónica que atrae a visitantes de todo el mundo. Su combinación de materiales, iluminación y diseño lo convierten en una pieza única no solo dentro de la catedral, sino también en el contexto del arte barroco español.


La catedral de Toledo, donde se encuentra el Transparente, es una obra maestra del arte gótico con características y elementos especiales:

  1. Dimensiones impresionantes: La catedral de Toledo es una de las catedrales góticas más grandes de España y del mundo. Con sus 120 metros de largo, 59 metros de ancho y una altura máxima de 44 metros, es una estructura imponente.
  2. Estilo arquitectónico: La catedral combina elementos góticos con influencias mudéjares y renacentistas. Su fachada principal presenta una decoración detallada y un elaborado rosetón, mientras que el interior se caracteriza por sus altas bóvedas de crucería y capillas adornadas.
  3. Capilla mayor: La capilla mayor de la catedral es una de las partes más destacadas. Aquí se encuentra el Transparente, una obra única del arte barroco que ilumina el sagrario detrás de él.
  4. Tesoros artísticos: La catedral alberga una gran cantidad de tesoros artísticos, incluyendo pinturas, esculturas y retablos de renombrados artistas como El Greco, Goya y Van Dyck. Además, cuenta con un magnífico conjunto de vidrieras que adornan sus ventanas.
  5. Puertas principales: La catedral tiene tres puertas principales, cada una con su propio estilo y decoración. La Puerta del Perdón, la Puerta del Reloj y la Puerta de los Leones dan la bienvenida a los visitantes con su belleza y simbolismo.
  6. Claustro: El claustro de la catedral es un oasis de tranquilidad, con su elegante arquería y jardines interiores. Es el lugar perfecto para disfrutar de un momento de paz y contemplación.
  7. Reliquias sagradas: La catedral de Toledo también es conocida por albergar importantes reliquias sagradas, como el Cristo de la Luz, un crucifijo que se dice fue un regalo de Carlomagno, y el Cáliz de doña Urraca, que se cree es el cáliz utilizado por Jesús en la Última Cena.

Estas características hacen de la catedral de Toledo un destino imprescindible para los amantes del arte y la arquitectura, así como para los devotos que buscan la conexión espiritual.


EL CANDELABRO. ILUMINANDO MENTES