Entre el humo de la guerra y la sombra de la represión, surge la figura de Francisco Abad Moreno “Chaleco”, guerrillero que desafió a Napoleón y enfrentó al absolutismo fernandino. Su vida, marcada por la pérdida, la valentía y la lucha por la libertad, refleja las profundas divisiones de la España del siglo XIX. ¿Cómo un hombre del pueblo se convirtió en símbolo del liberalismo? ¿Qué nos enseña su sacrificio sobre los costos de defender la Constitución?
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📷 Imagen generada por GPT-4o para El Candelabro. © DR
Francisco Abad Moreno “Chaleco”: Guerrillero de la Independencia y Mártir del Liberalismo Español
La figura de Francisco Abad Moreno, conocido por el apodo de “Chaleco”, constituye uno de los testimonios más elocuentes de la complejidad política y social que caracterizó España durante las primeras décadas del siglo XIX. Su biografía refleja las tensiones entre absolutismo y liberalismo que marcaron la transición del Antiguo Régimen, así como la brutal represión que sufrieron quienes defendieron los ideales constitucionales. La ejecución de este coronel el 24 de septiembre de 1827 en Granada simboliza la venganza realista contra los veteranos de la Guerra de Independencia que posteriormente abrazaron la causa liberal.
El contexto histórico en el que se desarrolló la vida de Francisco Abad Moreno está marcado por la sucesión de crisis que sacudieron España desde la invasión napoleónica de 1808 hasta la consolidación del absolutismo fernandino. La Guerra de la Independencia Española transformó profundamente la sociedad peninsular, generando nuevos liderazgos militares y políticos que emergieron del pueblo llano. Los guerrilleros, inicialmente surgidos como respuesta espontánea a la ocupación francesa, se convirtieron en actores fundamentales del conflicto y posteriormente en protagonistas de las luchas políticas del reinado de Fernando VII.
La tragedia personal que marcó los inicios de la carrera militar de Abad Moreno ilustra perfectamente la brutalidad de la guerra napoleónica en territorio español. La muerte de su madre y hermano durante la Contienda de Valdepeñas en junio de 1808 representa uno de los múltiples episodios de violencia que sufrió la población civil durante la ocupación francesa. Este acontecimiento traumático determinó su posterior compromiso con la resistencia armada, transformando al joven manchego en uno de los guerrilleros más efectivos de la región toledana y manchega.
La evolución de Francisco Abad desde guerrillero local hasta coronel del ejército regular demuestra la capacidad de ascenso social que permitió la Guerra de Independencia a individuos procedentes de clases populares. Su integración inicial en las guerrillas toledanas del teniente José Cacho en Villanueva de Bogas durante 1809 marca el comienzo de una carrera militar que lo llevaría a formar su propia partida guerrillera en febrero de 1810. La creación de esta fuerza irregular en Cañada de los Frailes, compuesta por combatientes manchegos como Juan Vacas, Juan Toledo y Lorenzo Requena, evidencia su capacidad de liderazgo y organización militar.
Los logros militares de la partida de Chaleco durante la Guerra de Independencia resultan extraordinarios por su magnitud y efectividad. Las 78 acciones de guerra documentadas, la captura de más de 400 caballos enemigos y las 1400 bajas infligidas a las fuerzas francesas convierten a esta guerrilla en una de las más exitosas de todo el conflicto peninsular. Estos números, aunque requieren análisis crítico debido a las posibles exageraciones propias de los partes militares de la época, sugieren una actividad militar intensa y sistemática que contribuyó significativamente al desgaste de las fuerzas napoleónicas en La Mancha.
El reconocimiento oficial que recibió Francisco Abad a través del despacho de coronel expedido por el general Castaños refleja la integración progresiva de los jefes guerrilleros en la estructura militar regular española. Esta promoción formal reconocía tanto sus méritos de guerra como la necesidad del Estado de incorporar a estos líderes populares en el ejército reorganizado tras la expulsión francesa. Sin embargo, esta integración no estuvo exenta de tensiones, especialmente cuando estos veteranos comenzaron a mostrar simpatías hacia las ideas liberales que habían emergido durante el conflicto.
La desconfianza que Fernando VII manifestó hacia Chaleco, materializándose en su retiro del servicio en 1817, ilustra la política represiva que el monarca desarrolló contra los militares sospechosos de liberalismo. Esta decisión regia refleja el temor del absolutismo restaurado hacia los veteranos de la Independencia, especialmente aquellos que habían desarrollado conciencia política durante la guerra. La participación de Abad Moreno en conspiraciones liberales en su domicilio madrileño confirma que estas sospechas reales no carecían de fundamento, aunque también demuestra la radicalización política de muchos exguerrilleros.
El episodio de 1820, cuando los estudiantes vallisoletanos salvaron a Chaleco del cadalso al grito de “¡Viva la Constitución! ¡Viva nuestro caudillo el coronel Chaleco!”, constituye uno de los momentos más dramáticos de su biografía y simboliza el apoyo popular que gozaban algunos veteranos de la Independencia entre los sectores liberales. La coincidencia temporal entre su prevista ejecución y el triunfo del pronunciamiento de Rafael del Riego añade elementos casi novelescos a su historia personal, mientras revela las complejas redes de solidaridad que unían a los opositores del absolutismo fernandino.
Durante el Trienio Liberal (1820-1823), la promoción de Chaleco a brigadier y su nombramiento como comandante general de La Mancha demuestran la reintegración de los militares liberales en la estructura del Estado constitucional. Su lucha contra las partidas absolutistas, particularmente contra la de Manuel Adame “el Locho”, representa la continuación de la guerra civil española bajo nuevas formas ideológicas. Estos enfrentamientos entre antiguos combatientes de la Independencia, ahora divididos por criterios políticos, ilustran la fragmentación social que siguió al conflicto napoleónico.
La capitulación de Francisco Abad ante el coronel Duque de Berri en Almedina tras la caída del régimen constitucional en 1823 marca el comienzo de su calvario final. A pesar de acogerse al indulto proclamado el 1 de mayo de 1824, las acusaciones de Manuel Adame sobre supuestos asesinatos cometidos en la Venta de Bienvenida desencadenaron un proceso judicial viciado desde sus cimientos. La búsqueda de testigos falsos por parte de los alcaldes Francisco Molina y Víctor Llorente, con la colaboración del abogado Francisco Jalón, evidencia la corrupción del sistema judicial durante la Década Ominosa.
El proceso y ejecución de Chaleco en Granada constituyen un ejemplo paradigmático de la justicia política ejercida durante la reacción absolutista posterior a 1823. La actuación del Regente de la Chancillería, José Salelles y Palos, que lo condenó a muerte basándose en testimonios fabricados, ilustra la instrumentalización del aparato judicial para eliminar a los enemigos políticos del régimen. La forma de la ejecución, mediante ahorcamiento seguido de decapitación, y la posterior exposición de su cabeza frente a la Venta de Bienvenida, responden a una voluntad de escarmiento público que caracterizó la represión fernandina.
La dimensión humana de la tragedia de Francisco Abad Moreno se revela en las cartas de amor intercambiadas con su esposa Sacramento Muñoz durante su encarcelamiento, documentos que han llegado hasta nuestros días como testimonio de la fortaleza emocional de la pareja ante la adversidad. La carta de despedida que escribió antes de su ejecución constituye un documento histórico de extraordinario valor, tanto por su contenido personal como por su significado político. Estos escritos permiten conocer la faceta más íntima de un hombre que afrontó la muerte con dignidad, manteniendo sus convicciones hasta el final.
Las consecuencias familiares de la ejecución de Chaleco ilustran la crueldad sistemática del absolutismo fernandino hacia las familias de los represaliados políticos. La persecución que sufrieron su viuda Sacramento Muñoz y sus cinco hijas menores de edad por órdenes reales demuestra que la venganza política se extendía más allá de los propios condenados. Esta práctica represiva, que buscaba el aniquilamiento social y económico de los linajes liberales, constituye uno de los aspectos más siniestros de la Década Ominosa y explica el odio que muchas familias españolas desarrollaron hacia el absolutismo fernandino.
La elección del Campo del Triunfo de Granada como lugar de ejecución de Francisco Abad Moreno no fue casual, sino que formaba parte de la simbología represiva del régimen absolutista. Este mismo espacio sería posteriormente escenario del ajusticiamiento de Mariana Pineda en 1831, convirtiendo el lugar en símbolo del martirio liberal granadino. La reutilización de espacios públicos para ejecutiones políticas responde a una estrategia de intimidación social que buscaba desalentar futuras resistencias mediante el terror ejemplarizante.
El legado histórico de Francisco Abad Moreno “Chaleco” trasciende su importancia individual para convertirse en símbolo de una generación de españoles que vivió las transformaciones más dramáticas de la historia nacional. Su trayectoria vital, desde guerrillero antinapoleónico hasta mártir del liberalismo, refleja las contradicciones de una época marcada por la violencia política y la inestabilidad institucional. Su figura representa tanto el heroísmo popular durante la Guerra de Independencia como la posterior persecución que sufrieron quienes defendieron los principios constitucionales frente al absolutismo restaurado.
La historia de Chaleco demuestra que la Guerra de Independencia Española no fue únicamente un conflicto patriótico contra el invasor extranjero, sino también el origen de las divisiones ideológicas que marcarían la España del siglo XIX. Los guerrilleros que combatieron inicialmente por la religión, el rey y la patria se dividieron posteriormente entre absolutistas y liberales, reproduciendo en el ámbito interno las luchas que habían librado contra los franceses. Esta evolución explica la amargura de las guerras civiles posteriores y la especial saña con que se desarrolló la represión política durante la Década Ominosa.
La documentación conservada sobre Francisco Abad Moreno, incluyendo correspondencia personal y expedientes judiciales, proporciona una perspectiva privilegiada sobre la mentalidad y experiencias de los protagonistas de esta época turbulenta. Sus cartas revelan a un hombre cultivado, políticamente consciente y emocionalmente profundo, que trasciende los estereotipos sobre los guerrilleros como simples bandoleros o aventureros. Esta documentación permite reconstruir no solo los hechos externos de su vida, sino también sus motivaciones internas y su evolución ideológica.
La figura de Francisco Abad Moreno “Chaleco” encarna las contradicciones y tragedias de la España de principios del siglo XIX, marcada por la transición violenta del Antiguo Régimen a la modernidad política. Su transformación de guerrillero patriota en mártir liberal ilustra la complejidad de un período histórico que no puede reducirse a interpretaciones maniqueas. Su legado pervive como testimonio de quienes sacrificaron sus vidas defendiendo ideales de libertad y constitucionalismo frente a la reacción absolutista, contribuyendo con su sangre a la lenta construcción de la España moderna.
La memoria de Chaleco se inscribe así en la genealogía del liberalismo español, recordando que los derechos constitucionales que hoy disfrutamos fueron conquistados al precio de innumerables sacrificios individuales y colectivos.
Referencias
Alonso Baquer, M. (1967). El modelo español de pronunciamiento. Rialp.
Artola, M. (1999). La España de Fernando VII. Espasa-Calpe.
Fontana, J. (2006). De en medio del tiempo: la segunda restauración española, 1823-1834. Crítica.
La Parra López, E. (2007). Fernando VII: un rey deseado y detestado. Tusquets Editores.
Tone, J. L. (1994). The Fatal Knot: The Guerrilla War in Navarre and the Defeat of Napoleon in Spain. University of North Carolina Press.
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